Se trata sin duda de uno de los lugares más hermosos de Argentina.
A bordo del catamarán Futaleufú y partiendo desde el muelle Modesta Victoria, enclavado en la bella Bahía Mansa, recorreremos la península de Quetrihué en una travesía de más de media hora hasta llegar a su extremo sur, desembarcando en Puerto Quetrihué, que en lengua indígena Araucana significa "quetri=arrayán", "hue=lugar" (donde hay arrayán).
Sedosas y delgadas láminas componen la singular y fría corteza de este árbol.
La planta, al segregar tanino, tiñe de un cálido rojo canela a la corteza que al desprenderse
deja a la vista sus características manchas de color blanquecino.
Durante el verano, pequeñas y hermosas flores blancas cubren a los arrayanes para dejar paso en el otoño, a los frutos de color negro-violáceo brillante, comestible, con el cual los aborígenes elaboraban una particular bebida alcohólica llamada "chicha".
A través de un sendero entablonado se puede transitar el bosque y reconocer las diferentes etapas de crecimiento del arrayán, como así también su convivencia con otras especies vegetales y animales.
Su experiencia en la naturaleza puede ser inolvidable
si la realiza con el compromiso de preservarla...